Os presentamos a TINO, un pinscher muy zalamero y mimoso que nació aproximadamente en enero de 2018. Busca la adopción de una familia que quiera compartir con él todos los años de su vida, donde sepan cuidarle y quererle como al que más.
Vagaba por la calle, solo, desnutrido, tan delgado que nos hace pensar en la cantidad de días que llevaría sin encontrar alimento que llevar a la boca. A TINO lo encontraron tres personas maravillosas que no dudaron ni un segundo en darle la oportunidad de una vida digna donde satisfacer todas sus necesidades.

Nuestro chico en tres meses ha recuperado fuerzas, ha puesto todos los kilos que le faltaban y está lleno de energía para hacer de su vida un parque de juegos. TINO es un perro bueno y obediente. A pesar de todas las carencias afectivas de los primeros años de vida, el pequeño es súper cariñoso tanto con adultos como con niños. Además, es divertido e inteligente. Ha aprendido que para hacer sus necesidades debe esperar a estar en la calle. Aun es un perro muy joven, por lo que salir de paseo le vuele loco.