La preciosa de EVEREST es hermana de KIARA, ambas nacieron en abril de 2016 y son de tamaño mediano. Han vivido todos estos años en un taller de coches, más o menos refugiadas, más o menos atendidas. Y, por fin, ha llegado la oportunidad de oro para encontrar una familia de adopción, que las arrope en las noches frías de invierno, las deje dormir a pata suelta en el sofá y sientan el calor de su propio hogar.

¡EVEREST derrocha dulzura! Es una perrita juguetona y divertida. Se encuentra en la edad de máxima energía y vitalidad, donde correr y jugar a la pelota con los voluntarios es su objetivo principal. Con el resto de perros se lleva muy bien. Es de esas perras que saben respetar los espacios de los otros compis de cuatro patas, y no quiere lios inoportunos.

Nuestra chica está sana, esterilizada, vacunada y se entrega con contrato de adopción. Con personas es sociable y noble. Durante los primeros momentos de reconocimiento se muestra algo tímida e insegura, (propio de las experiencias pasadas), pero a los pocos segundos se entrega en carantoñas; hasta tal punto de buscar a los voluntarios por el patio para comenzar una nueva sesión de mimos. Le gusta tanto las caricias que se tumba en el suelo ‘panza arriba’ para que le puedas rascar bien su barriguita :).

EVEREST va bien con cualquier familia que esté dispuesta a darle sus horas diarias de paseos y de descarga de energía.

Además, es muy obediente e inteligente. Atiende a su nombre al instante, acudiendo a la llamada sin rodeos. Necesitamos para nuestra chica bonita una familia que la quiera y cuide como se merece, y tener por fin un hogar donde sentirse feliz y segura todos los días de su vida.